Aunque estos días debería aprovechar para estudiar todo lo posible, haré una excepción.
El hecho que me inquietaba, se ha convertido en una compañía permanente, y por ese mismo motivo he decidido llevarlo de la mejor manera posible. Como ahora se que todo tiene una explicación, e incluso mi forma de pensar, intento evadir la preocupación, tristeza y desgana que a veces me persigue.
Sí, es cierto, eso es vivir.
Él también lo sabe, En pocos días volverá. Menos mal que la vida TE QUITA y TE DA (como su canción dice), y por suerte lo que a mi me da, me llena el alma.
Quedan dos semanas para el 9 de enero, para tenerlo aquí, para disfrutar de él, para oír, para olvidar el resto del mundo, para respirar la fragancia de su música y su voz.
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